El regulador de juego italiano, L'Autonoma dei Monopoli
Amministrazione di Stato (AAMS) ha publicado su informe anual que muestra
claramente el grave deterioro de los ingresos de póker online. De un máximo de
41 millones de euros en enero, los ingresos del juego han caído un 43% a poco
más de 23 millones de euros.
Los ingresos de torneos han caído casi un 75% desde que se
introdujo por primera vez la regulación, pasando de un máximo en enero de 2011 de
35,3 millones de euros a bajar a 9,1 millones de euros en agosto de 2012.
Los juegos cash, que se introdujeron por primera vez hace poco
más de 15 meses y que en un principio resultaron ser un boom para el mercado,
se han reducido un 41% en el último año.
Los problemas del póker de Italia se puede atribuir a dos cuestiones
relacionadas entre sí: Los altos impuestos de juego y la baja liquidez del
jugador. La recaudación de impuestos aumenta
sustancialmente el coste del entretenimiento para jugadores recreacionales y hace
inviable la fuente de ingresos para los profesionales.
Sin embargo, el AAMS ha tomado conciencia de los graves
problemas que se enfrenta su mercado del juego interno y ahora las discusiones se
centran en encontrar maneras de revertir la situación. Una posición similar
existe en España y una de las propuestas que se barajan está en promover que
ambos países combinen sus grupos de jugadores en 2013. De hecho, se celebró una
reunión este pasado verano involucrando a otros países con similares problemas
como Francia y Portugal. De esa reunión surgió la nota de
prensa siguiente: "Las discusiones se llevaron a cabo con las condiciones
necesarias para una posible liquidez compartida en ciertos juegos entre algunos
de los países participantes en la reunión."
Los pasados días 19 y 20 junio, se reunieron en Barcelona
(España), los reguladores del juego online de cuatro países europeos, Francia,
Italia, Portugal y España. El objetivo del encuentro era profundizar en una
estrategia común de regulación del juego online, propiciar la cooperación
operativa en el ámbito normativo de la regulación y reforzar los intercambios
de información.
Los cuatro países participantes comparten un principio de
actuación común: el juego no es un actividad normal, sino una actividad en la
que cada Estado debe garantizar el orden público en su territorio, protegiendo
a los consumidores, frente al fraude y actividades criminales, previniendo la
adicción, especialmente entre los grupos vulnerables, asegurando la integridad
del deporte, y de los juegos, y luchando contra el juego ilegal. Estos
objetivos sólo pueden ser efectivamente conseguidos por cada Estado individual
en relación con la cada realidad ética, cultural y social, a través de sólidos
instrumentos de regulación, llevados a cabo por las autoridades públicas, y no
exclusivamente a través de las fuerzas del mercado. Este principio y visión
comunes hacen posible un entendimiento más pleno y fructífero que permite
avanzar en una cooperación que siente las bases de una mejor protección de los
fines previstos en las respectivas legislaciones.
El conjunto de las reuniones permitió ir perfilando una
estrategia común regulatoria y sentando las bases de un intercambio de
información tanto en el ámbito de los operadores licenciados en más de un país,
como en la lucha contra los operadores ilegales, y un mejor entendimiento de
los distintos juegos autorizados en cada país, su estructura legal y la
información del mercado. Todo ello teniendo en cuanta las posibles
restricciones impuestas por la legislación de protección de datos.
Adicionalmente, se dieron los pasos iniciales para una posible liquidez
internacional en determinados juegos y en algunos de los países participantes
en la reunión.
A pesar del distinto grado de avance normativo y de
desarrollo del mercado que se observa en cada uno de los cuatro países, las
reuniones sirvieron para un mejor conocimiento de los respectivos reguladores y
sus equipos y para estrechar los lazos de cooperación y permitir un avance
conjunto, en el que los cuatro países se muestran abiertos a la incorporación
de otros países europeos con principios y estrategias regulatorias similares.
El próximo encuentro se celebrará en París, en Diciembre de
2012
Mientras tanto, Italia tiene la esperanza de poder detener la fuga de su mercado de juego online después de que las máquinas tragaperras online se lancen oficialmente en diciembre.
En fin, por un lado, la liquidez internacional se ve con buenos ojos por parte de los reguladores pero no parece que vaya ser inminente; por otro lado, en los tiempos que corren, no creo que los políticos estén
por la labor de bajar impuestos aunque de este modo es obvio que recaudarían
más. Ahora, en un período de recesión y austeridad no es políticamente muy vendible.
El futuro del póker está lejos de ser brillante no solo en Italia y sino en Francia y España si antes no lo remedian tomando cartas sobre el asunto...
Posts relacionados:
No hay comentarios:
Publicar un comentario